domingo, 3 de noviembre de 2013

     


INSTITUTO POLITÉCNICO NACIONAL


UNIDAD PROFESIONAL INTERDISCIPLINARIA DE INGENIERÍA CAMPUS ZACATECAS


INGENIERÍA AMBIENTAL


TOXICOLOGIA AMBIENTAL


ALUMNA: MARIANA VALDEZ CASTILLO




08/11/2013

“La  información que se presenta en este blog es con fines de divulgación del conocimiento,  siendo una interpretación del documento original que se referencia al final, y se respetan todos los derechos de autor.”


PERFILES TOXICOLÓGICOS DE LOS BIFENILOS POLICLORADOS (BPC's).


INTRODUCCIÓN
Los BPC son sustancias químicas industriales clasificadas como contaminantes orgánicos persistentes. No existen de manera natural. Son compuestos organoclorados de fórmula condensada C12H10-nCln. Las moléculas de bifenilos policlorados (figura 1) en forma separada se conocen como congéneres o bifenilos sustituidos mono, bi, tetra, etcétera.


Figura 1. Estructura química de la molécula de BPC general. 


Se reconoce la existencia de 209 congéneres diferentes, y la mezcla de varios bifenilos con diferente grado de cloración da como resultado un aroclor o askarel, o bien, cualquiera de los nombres de los fluidos comerciales.

Los BPC's son líquidos viscosos en extremo resistentes a la descomposición y con excelentes capacidades de aislamiento eléctrico y con propiedades térmicas. Su gran estabilidad y poca corrosión e inflamabilidad los convierte en sustancias industriales apreciadas.

Aparte de sus usos en electricidad, los BPC se utilizaron también como agentes plastificadores, transmisores de calor y fluidos eléctricos, fluidos en bombas de vacío y compresoras, lubricantes adhesivos especiales y cubierta para papel de copiado sin carbón. Aunque ya no se les fabrica en América del Norte y su utilización está altamente restringida en Canadá, Estados Unidos y México, grandes cantidades de BPC's aún están en uso en equipo eléctrico.

Los BPC's forman parte de la “docena sucia” de los compuestos orgánicos persistentes (COP’s) incluidos en el Convenio de Estocolmo. La toxicidad de dichos compuestos radica en que tienden a bioacumularse en los organismos vivos (en tejido grasos y sangre) e incorporarse en la cadena alimenticia, es decir, se biomagnifican. Todos los seres vivos están expuestos a los BPC’s a través de los alimentos, aire y agua.

La presente información fue realizada y publicada por la Superfund Amendments and Reauthorization Act (SARA) la cual establece los perfiles tóxicos de los bifenilos policlorados (BPC’s) y dicta a las instituciones bajo su jurisdicción que los estudios acerca de dichos compuestos tóxicos deben hacerse al menos cada 3 años para mantener actualizada la información.





DESARROLLO

Continuación se presentan los diferentes efectos a la salud que tienen los BPC’s (o PCB’s por sus siglas en ingles) en los diferentes sistemas fisiológicos de los humanos y algunos animales. Se toman como antecedentes ya que son investigaciones que se han realizado en años anteriores y dan pauta para investigaciones futuras.


EFECTOS SISTÉMICOS

      Estudios de efectos en el sistema cardiovascular de los animales.

En el 2003 fueron evaluados los efectos de exposición crónica a las dioxinas como lo es el compuesto 2,3,7,8 – Tetraclorodibenceno-pentadioxina (TCDD) y compuestos similares a las dioxinas como el 3,3',4,4',5pentachlorobifenil (PCB-126) en el sistema cardiovascular de ratas femeninas. Los resultados indicaron que el sistema cardiovascular de las ratas es un órgano blanco por la dioxina y el toxico PCB-126, el cual incrementa la incidencia de la cadiomiopatia y la arterites del vaso coronario. En el 2004 se demostró que las ratas femeninas expuestas al PCB-126 desarrollaron niveles altos de colestero, incrementaron la presión arteria y la masa del miocardio con una dosis de 224 μg/kg-peso inyectada cada dos semanas.


Estudios de efectos en el sistema muscoloesqueletico.

  •  Efectos sobre la masa mineral ósea (BMD – por sus siglas en inglés) en los humanos.

Se tiene a hipótesis de que los BPC’s dañan o degradan la estructura ósea mineral de los humanos al exponerse a concentraciones relativamente pequeñas, sobre todo cuando estas sustancias tóxicas se encuentran diluidas en cuerpos de agua (como los ríos) pueden ser altamente productoras de un daño adverso en los humanos.
Una limitante de los marcadores bioquímicos es que se cuenta con un número pequeño de participantes, por lo que no es suficiente para detectar las enfermedades relacionadas con los BPC’s.
A pesar de lo anterior se ha encontrado que cuando PCB-138, PCB-153, PCB-180 actúan en conjunto, causan un daño adverso a la BMD. Esto no significa que dichos tóxicos sean los responsables de que se tengan niveles bajos de BMD.

  •  Efectos sobre la masa mineral ósea (BMD – por sus siglas en inglés) en los animales.

Se han realizado estudios en los que se han expuesto crías féminas de cabra al BPC-153 y BPC-126. Las crías fueron expuestas en el periodo de gestación, perinatal y después del nacimiento en la etapa de lactancia por medio de maíz infectado con dichos compuestos. Tras dicha exposición a los tóxicos se encontraron que los BPC’s causan malformaciones óseas, sin embargo no reducen la cantidad de BMD.

*Efectos en el sistema endócrino.
  • Efectos en el sistema endócrino de los humanos.

Se ha encontrado que los seres humanos que están expuestos a los BPC’s  (BPC-153 específicamente) son susceptibles a desarrollar una diabetes hasta el grado de llegar a una diabetes mellitus tipo 2.

  • Efectos en el sistema endócrino de los animales.

Cuando se expone a crías de ratas en periodos de gestación a los BPC’s (específicamente Aroclor 1221)  se producen alteraciones en la hormona leutilizante -una vez que las crías han nacido-, dicha hormona es la responsable de que se lleven a cabo la producción de óvulos o de testosterona en los machos. También se encontraron alteraciones en los tejidos del tracto reproductivo.
Se ha demostrado que se puede producir una disminución en las concentraciones de una hormona implicada en la homeostasis del calcio. Este efecto puede ser extrapolado a los humanos.

Efectos inmunológicos y linforreticulares.
  • Efectos inmunológicos y linforreticulares en los humanos.

En Eslovaquia (2008) se comprobó que la exposición a los BPC’s en la etapa prenatal provoca que el timo (órgano del sistema linfático) se desarrolle con un menos tamaño, lo que causa enfermedades respiratorias y sugiere un desarrollo inmunológico anormal. 
La exposición a los BPC’s en los niños causa una función inmune deficiente ya que afecta negativamente a la respuesta inmune a las vacunas infantiles (como lo es el tétanos).

Efectos neurológicos
  • Efectos neurológicos en los humanos.

Se tiene la sospecha de que la exposición a los BPC’s tiene efectos neurodegenerativos en las mujeres al producir la enfermedad de la motoneurona (relacionada directamente con la locomoción) y Parkinson.
  • Efectos neuroconductuales en los animales.

Cromwell et al. (2007) describió que la exposición a los BPC’s en las crías de ratas y la madre provoca que tengan cambios en su comportamiento (interacción social) ya que la madre no acepta a las crías y las crías no buscan la leche materna por un síndrome de ansiedad.
Cuando la madre está expuesta al BPC-126 mediante aceite de maíz reduce el número de crías por camada.
  • Efectos neuroquímicos.

Se realizó un estudio en ratas al deshidratarlas con una exposición ora al Aroclor 1254 (tipo de BPC) para evaluar los mecanismos cerebrales de regulación de fluido corporal y se encontró que se produce vasopresina (hormona liberada cuando existen cambios en el volumen sanguíneo) para tener un mecanismos de autorregulación.
  • Otros efectos neurológicos.

Se comprobó que cuando se expone a las crías de rata al Aroclor 1254 desde su concepción hasta 60 días después de la misma, el crecimiento del hipocampo se ve reducido. Se produce una isquemia cerebral cuando la exposición perdura de 6 a 8 semanas.
El estudio se hizo a través de cromatografía de gases, reacción en cadena de la polimera con transcriptasa inversa cuantitativa y tinción de las fibras musgosas del hipocampo con sulfuro de plata de Timm.

Efectos reproductivos.

  • Efectos reproductivos en los humanos.

En Michigan se realizó un estudio a mujeres mayores de 24 años sobre la exposición a los BPC’s (específicamente al Aroclor 1254). Dicho estudio se realizó al extraer muestras de sangre y se encontró que se tenían concentraciones de Aroclor 1254, sin embargo, no se observó que los  BPC’s afectaran el ciclo menstrual ni el tiempo de menopausia.
  • Efectos reproductivos en los animales.

Se comprobó en varias investigaciones que la exposición a los BPC’s en las crías de ratas causa un aumento en la distancia anogenital, tamaño de protsta y disminución del peso del epidídimo.
Cuando las crías que nacieron de madres expuestas a los BPC’s llegan a la etapa de madurez sus testículos son más pequeños y el número de espermatozoides disminuye, dichos espermatozoides son más susceptibles a la oxidación ya que reaccionan más fácil con el oxígeno.

Efectos en el desarrollo
  • Efectos en el desarrollo de humanos.

En un estudio hecho en Finlandia (1997 - 2000) se comprobó que la exposición a los BPC’s en los niños recién nacidos no causa deformismo o efectos adversos en el desarrollo de dientes natales y neonatales. Así mismo se sugirió que los niveles de exposición de BPC’s en Finlandia son propensos a estar por debajo del umbral para causar perinatal erupción de los dientes.
Sin embargo, en Eslovequia se hizo un estudió donde se comprobó que en los niños expuestos a altas concentraciones de BPC’s causa degeneración en el esmalte de los dientes, una mayor susceptibilidad a la caries y a la gingivitis.
Por otro lado, se ha comprobado que se tiene una estrecha relación entre la incidencia de criptorquidia (descenso incompleto de uno o ambos testículos a través del canal inguinal hacia el escroto) en niños varones y la exposición a altas concentraciones de BPC’s durante la vida prenatal y postnatal. 
En Estados Unidos de América se tiene la sospecha de que la exposición en niños a altas concentraciones de PCB (2.8 mg/L) contenida en la leche materna causa efectos adversos en el sistema auditivo. Así mismo la exposición al BPC – 180 causa un deterioro en la visión cuando el niño llega a alcanzar una edad de 15 meses aproximadamente.
Dentro de los efectos adversos relacionados con el desarrollo del sistema endocrino se ha encontrado que la exposición a BPC’s causa un daño significativo y negativo sobre las hormonas gonodales robustas en los recién nacidos (mujeres y hombres). También se ha encontrado que la leche materna y el cordón umbilical retienen gran parte de las concentraciones de BPC’s ambientales, por lo que pueden transmitirse a los fetos.
Además se ha comprobado que la exposición de las niñas a los BPC’s en el ambiente acelera la menarquía temprana (primer episodio de sangrado por la menstruación). Este fenómeno no se asocio con el consumo de leche materna.
Los estudios han revelado que la exposición a ciertos congéneres de los BPC’s y en elevadas concentraciones causan un desarrollo sexual acelerado en hombres y mujeres ya que propicia el desarrollo de vello púbico en hombres y aumento de glándulas mamarias en mujeres.
  • Efectos en el desarrollo de animales.

Se realizaron estudios por Shirota et al. (2006) y Steinberg et al. (2007) donde se encontró que la exosicón a BPC’s (Arclor 1221 y BPC – 126 ) causan en las crías de rata una reducción significativa en su estimulación de apareamiento, vocalizaciones, movimientos locomotores y la probabilidad de que las hembras se apareen. Se ha comprobado que la exposición al Aroclor 1254 causa ototoxicidad en las ratas.
En otro estudio realizado por Lyche et al. (2004) se expuso a cabras embarazadas a dosis ambientales de BPC-153 y BPC-126 de 98 mg/kg/días y 0.049 mg/kg/día, respectivamente. Dicha exposción se relaciono con el retraso de la pubertad en la descendencia femenina.

Cáncer

De manera general, en los humanos, se ha asociado la exposición a los BPC’s con mayor átomos de cloro en sus estructura con la formación de células malignas y desarrollo de cáncer, como lo es el cáncer de próstata.
En las ratas se ha comprobado que el ingerir dioxinas y BPC’s causa degeneración, inflamación y lesiones atróficas y adenomas acinares (esporádicos y carcinomas) en el páncreas, como su órgano diana. El consumo de BPC-126 causa cáncer pulmonar al provocar la fibrosis en los alveolos.
Se ha comprobado en ratas hembras que el consumo crónico de BPC – 153 causa lesiones no neoplásicas en el hígado, y efectos adversos en la glándula tiroides, ovarios, oviducto y útero.
Por otro lado, cuando las ratas consumen de forma crónica el BPC – 126 se produce la actividad cancerígena ya que aumenta la incidencia de calangiocarcinoma del hígado, quistes y escamas en los pulmones y carcinoma de células escamosas gingivinales de la mucosa oral. También provoca efectos adversos en el páncreas, riñón, corazón, glándula tiroides, el timo, el bazo, glándula del clítoris y la arteria mesentérica.
Un estudio en el que se involucraron los BPC – 153 y BPC – 126 demostró que causa efecto sinérgicos en los órganos descritos y puede provocar la incidencia del carcinoma de células escamosas en el útero. Resultados similares se encontraron al evaluar con BPC-126 y BPC-118.

A continuación se muestra en la tabla 1, un resumen de los estudios epidemiológicos (específicamente de cáncer) recientes que se han realizado sobre humanos por la exposición a los BPC’s. 

Tabla 1. Estudios de cáncer recientes realizados sobre humanos por la exposición a los BPC's.

Tipo de Efecto
Niveles de exposición
Número de individuos expuestos
Periodo de estudio
Resultados
Referencia
Cáncer – Limfomana de Non-Hodgkins
PCB’s y otros organoclorados
100 expuestos y 100 control
Sin información
PCB’s 156, 180 y 194 fueron asociados con el incremento del riesgo a desarrollar cáncer.
De Roos et al. 2005
Cáncer de próstata
30 tipos de BPC’s y 18 perticidas organoclorados
58 expuestos y 99 control
Sin información
El PCB-180 fue asociado con el incremento del riesgo a padecer cáncer de próstata.
Ritchie et al. 2003
Cáncer causado por antígenos específicos de la próstata
PCB’s y otros compuestos organoclorados persistentes.
58 expuestos y 20 control
Sin información
En casos tratados con PCB-153 fueron relacionados con el aumento del 95% de antígenos específicos para la próstata.
Hardell et al. 2006
Cáncer de próstata
30 congéneres de BPC’s administrados en suero.
58 expuestos y 99 control
Sin información
Se obtuvo que el grupo expuesto tiene altas posibilidades de generar cáncer de próstata en un orden de dos veces mayor a los que no fueron expuestos.
Ritchie et al. 2005
Cáncer de próstata
Exposiciones binarias a campos electromagnéticos y BPC’s.
387 expuestos y 5 control
1987-1994
No se asoció ningún efecto para desarrollar cáncer de próstata, lo que sugiere investigaciones más profundas
Charles et al. 2003
Cáncer testicular
38 congéneres de BPC, DDT, hexaclorobenzeno y compuestos clorados
61 expuestos y 58 control
Sin información
Se produjo un aumento de 95% de posibilidades de presentar cáncer de próstata al estar expuesto a los químicos
Hardell et al. 2003
Cáncer testicular
37 tipos de BPC’s
58 expuestos
1997-2003
Los resultados presentaron que las madres de los  individuos que desarrollaron el cáncer tienen una alta concentración  de BPC’s.
Hardell et al. 2004

CONCLUSIONES

  • Las personas están expuestas a cantidades variables y a diferentes mezclas de BPC’s y a otras sustancias tóxicas al mismo tiempo. Esto dificulta la tarea de determinar hasta qué punto la exposición a los BPC’s afecta a la salud humana. 
  • Muchos estudios apuntan a una relación entre la exposición a los BPC’s y un aumento en el riesgo de padecer cánceres del hígado, páncreas y próstata.
  • La exposición a los BPC’s puede afectar a la reproducción humana y se ha relacionado con una disminución del número de espermatozoides móviles en los hombres.
  •  La exposición a los BPC’s durante el embarazo y la lactancia se ha relacionado con un variaciones y anormalidades en el crecimiento y el desarrollo durante la infancia y adolescencia. 
  • La exposición a los BPC’s se ha vinculado también con efectos neurológicos, como entumecimiento, dolores de cabeza, y necrosis neuronal.
  •  En los animales, la exposición a una única dosis elevada de BPC’s puede provocar dificultad para respirar, cambio en la conducta y diversas enfermedades.
  •  Se observó que los BPC’s perjudican especialmente a los pulmones, hígado, sistema endrocrino y el páncreas.
  • En pruebas con animales expuestos a los BPC’s a través de la comida se observaron los efectos sobre la fecundidad, los órganos reproductores, y la actividad hormonal femenina.
  • Las crías de animales a los que se les suministran BPC’s  través de los alimentos durante la gestación y la lactancia también pueden resultar afectadas, y en muchas se han observado problemas de comportamiento.
  •  Los efectos observados de los BPC’s sobre el sistema inmunológico son una menor producción de anticuerpos, mayor vulnerabilidad a las enfermedades y una disminución del peso del timo. 


REFERENCIAS

  • Obaid et al. Agency for toxic substances and disease registry divsion of toxicology and enrinmental medicina. Atlanta, GA.. Abril 2011

Fecha de consulta: 03/11/2013